sábado, 6 de septiembre de 2008

Mermeladas veraniegas



Comenzamos con la ineludible mermelada casera de ciruelas claudias aromatizada con menta fresca.
Como ya es un clásico en casa y nos gusta a todos, voy a hacer cantidad para todo el año.


Con las cantidades de la receta salen unos 12 tarros de vidrio de unos 250 a 300 ml.
Es un magnífico laxante natural y un placer de dioses sobre una tostada o una loncha de queso manchego tierno.

Unos 4 kilos de ciruelas claudias maduras. Encargarlas a vuestro frutero de confianza y os traerá una caja para vosotros. (Gracias Victor).
Azucar hará falta algo menos de 2 kilos.
Un limón grandecito, del que solo usaremos la ralladura.
Tres hojas de menta fresca.
Unos guantes de goma finitos (no os podeis imaginar como acaban las uñas sin ellos).

Lavar bien al chorro las ciruelas.
Poner a cocer una cacerola pequeña con agua.
Ponerse guantes que manchan las manos y no sale en varios días.
Con un cuchillo de punta hacer un corte en forma de cruz en el culo de cada ciruela y ponerlas de 6 en 6 en el cazo con el agua hirviendo, habiéndoles retirado el rabito.
Darles una vuelta para escaldarlas y sacarlas (15 segundos).
Quitarles las pieles y el hueso e ir colocándolas en una fuente.
Cuando tengamos toda la pulpa la pasamos por el pasapuré con la rejilla más gorda, para quitar las hebras verdes que pudieran quedar.
Pesamos y añadimos las dos terceras partes de su peso en azucar (600 g de azucar por cada 1000 de pulpa).
Volcar en cacerola o vaso del robot (My Coock o Thermomix).
Añadimos la ralladura de un limón grande.
Ponemos a cocer a fuego suave durante 35 minutos, removiendo con frecuencia con una cuchara de palo.
Cuidado que no se agarre, fuego suave pero tiene que hervir.
Cuando falten 5 minutos añadir las 3 hojas de menta picadita.
Envasar en tarros esterilizados y cerrar inmediatamente.
Comprobar la estanqueidad y esterilizar la conserva por cocción durante 30 minutos (20 en olla exprés).

NOTAS: En la MyCoock 35 minutos, Temp 100, vel 2 con la mariposa y sin tapar con el cubilete. Es muy cómodo pero hay que hacerlo en tres tandas porque no cabe todo.
Si la queremos con más consistencia (esta receta es casi líquida) podemos añadir dos manzanas golden ralladas (con piel), pero aunque le da una consistencia magnífica estropea parte del esfecto de laxante, pues la manzana es astringente.
Espero que os guste.
Con las cantidades descritas salen 12 tarros de mermelada.
Si el proceso de selección de taros y tapas herméticas, la limpieza de los tarros y tapas, así como la esterilización de la conserva es adecuado, podemos consumirlas a lo largo de una año manteniédolas en lugar seco y fresco. Mejor al abrigo de la luz (armario de la cocina sirve).

Otro día me extiendo más en el proceso de envasado y esterilización.

miércoles, 6 de febrero de 2008

ACEITUNAS GRACIAS A LOS AMIGOS

Yo le tenía ganas a aliñar unas aceitunas y nunca me decidía. Es como lo de hacer chorizos en casa, que no lo pierdo de vista.

Gracias a los amigos he podido "realizarme" esta temporada.

Sorprendentemente fácil, yo solo he puesto esto:












Agua, sal y un huevo.






El resto es regalo de mis muchos amigos.

Cuando "Los de Morata" me ofrecieron ir a cojer aceitunas a sus olivos, y encima nos invitaron a unas gloriosas patatas con níscalos, yo empecé a creer que los amigos existen.



Hubo que pararles los pies cuando ya llevábamos un cubo grande. Yo quería experimentar a aliñar aceitunas, no poner una fábrica.

Pasamos a relatar la experiencia. Despues de consultar diversas fuentes experimentadas, me decidí por curarlas sin sosa, símplemente poniendolas en el patio en un cubo con agua y cambiándoles el agua a diario durante un mes y medio.

Luego hay que aliñarlas y envasarlas.

Para este menester tambien es preciso contar con amigos.

Encarni me regaló los ajos de su pueblo, y la abuela de Gema la guindilla y el orégano.



Luego solo tuve que envasarlas, poner los dientes de ajo, pelín de guindilla, orégano y salmuera (que el huevo fresco se separe del suelo).

Cubrirlas de aceite (para evitar el moho). Taparlas y esperar otro mes y medio.



Un puntito amargas como a mi me gustan.
Han sido todo un éxito.

Si mis "proveedores" me siguen aportando esa exquisita materia prima, seguiré intentando perfeccionar la técnica.

El año que viene las rajo (y no es una amenaza).




MARISCADA EN LA MANGA





Con la excusa de examinarnos de Patrón estuvimos en La Manga en casa de unos magníficos amigos.








Fuera de la temporada turística podemos disfrutar de muchas zonas de España, como si fueran auténticos paraisos.
Un clima suave mediterráneo, con días soleados y fresca brisa. Poca gente y ninguna aglomeración. Ya lo he dicho, el paraiso de invierno.


Mirad que flores en pleno invierno.

Pero la cuestión gastronómica tampoco se quedó atrás.
Cerca del mar optamos por sus frutos frescos para hacer a la plancha.

Ricos salmonetes y sepias medianitas.

Cigalitas terciadas y gamba roja local.
La única concesión fuera de la plancha fueron unas almejas y unos mejillones al vapor, con un toque de apio que daba un punto exquisito a los mejillones.

Impresionante. No hay más que decir.
Está claro que, entre la buena compañía, el clima, y los maravillosos alimentos, no va a quedar otro remedio que repetir.
Gracias Urbano y Miriam. Tarde pero de corazón.